Se alegraba mucho de estar en la academia, rodeado de todo tipo de gente, eso lo hacia divertido.
Una mariposa se poso sobre su nariz, él sonrió levemente, mientras seguía con los malabares, e intentaba no espantar al pequeño animal. Aquella pequeña mariposa blanca trajo recuerdos en su mente… recuerdos de su amado Iz…
¡Demian! Un llamado lo distrajo, perdiendo la concentración, las manzanas comenzaron a caer una por una en su cabeza, y la mariposa dejo el lugar. Se sobo, mientras veía como el pequeño animal se alejaba.
Dirigió su mirada hacia donde provenía la voz, se dibujo una gran sonrisa sobre su rostro – ¡Kiri-chan! ¡Kiri-chan! \^^/ – Alzo su brazo derecho, saludando enérgicamente al otro.